En este año de estrenos por tierras hasta ahora desconocidas para Lurte nos tocaba hacer para y fonda en Carbajo, Cáceres.

Habíamos sido invitados a participar en el Magusto , un festival de música folk que se celebra desde hace nada menos que siete años y que a fuerza de mucho trabajo por parte de la organización ha conseguido hacer pasar por sus escenarios a lo más destacado del panorama nacional e internacional del Folk.

Salimos de casa con la ilusión de que el  poder almogábar acabara por conquistar la tierra de Viriato y el entusiasmo de compartir ese momento con gente de la talla de L´mentos, Realejo, Scath, La Musgaña y Wolfstone. Pero a mitad de camino no sólo nos cayó del cielo toda el agua que llevaba acumulándose semanas sino también el notición de última hora de que Carlos Núñez  recién llegado de Río de Janeiro aterrizaba en Carbajo  ¡para participar en el festival!.

Además de que es siempre un placer escucharlos en directo fue un verdadero  honor compartir el bakcstage  con todos ellos, intercambiando experiencias e instrumentos (¡cómo alucinaron La musgaña y Carlos Núñez con la gaitola alemana!).

Os podéis imaginar la cara de la gente cuando aparecimos por allí , pero el susto sólo les duró lo que se tarda en hinchar las gaitas. Desde la primera nota todo el mundo se volcó con nosotros disfrutando de la música que, como dice Chaime, es demasiado heavy para ser sólo Folk.

Aunque el tiempo no acompañó, la excelente comida, el licor de bellotas y el calor, de la gente de la organización  en especial, y del público en general hicieron que el fin de semana se quedara grabado en nosotros como lo hacen las cosas que merecen la pena.

Para los que piensan que  Carbajo es uno de esos sitios en los que se cambia a la gente por ron, decirles que nada más lejos de eso, es un ejemplo de que con muchas ganas y mucho tesón se pueden sacar adelante proyectos que muchas ciudades más voluminosas, que no más Grandes, desearían para sí .

 Fdo. Arantza C. Hernando

Cronista por un día